MisericordiandoEl proyecto "Misericordiando" busca responder a las dos prioridades del XVIII Capítulo general: la salida a los más desfavorecidos y la opción por los jóvenes. Se trata de favorecer espacios que ayuden a que los jóvenes tengan esa proximidad con los más pobres desde la misericordia, la ternura, la compasión, la cercanía, la escucha.
Son precisamente los jóvenes quienes pueden ayudar a la Iglesia a mantenerse joven, a no caer en la corrupción, a no quedarse, a no enorgullecerse, a no convertirse en secta, a ser más pobre y testimonial, a estar cerca de los últimos y descartados, a luchar por la justicia, a dejarse interpelar con humildad.
El proyecto “Misericordiando” quiere ser un cauce de ayuda que conecte a los jóvenes con los más necesitados del entorno desde acciones concretas de acogida, cercanía, amistad, diálogo, fraternidad, compartir.
La llamada del Papa Francisco está dirigida a todos los cristianos: «No podemos quedarnos tranquilos en espera pasiva en nuestros templos». «El Evangelio nos invita siempre a correr el riesgo del encuentro con el rostro del otro». De alguna manera queremos acompañar y motivar a los jóvenes en esta salida.